El sistema de salud mexicano necesita mayor atención y recursos. Las familias necesitan una mayor protección.
El sistema mexicano de salud no es capaz de cubrir el mínimo necesario para alcanzar una cobertura total en medicamentos. Se calcula que 73 por ciento del gasto nacional en fármacos proviene del bolsillo de las familias, aseguró Misael Uribe Esquivel, vicepresidente del Consejo Directivo de la Fundación Mexicana para la Salud.
Al participar en "El encuentro de pensadores para crear la carta de las obligaciones del ser humano", que es organizado por la UNAM y el capítulo mexicano de World Future Society, el especialista informó que el valor de mercado de medicamentos en México es de 186 mil millones de pesos.
De ese total, refirió, el sector privado paga 134 mil millones de pesos, 72 por ciento, y el público 52 mil 590 millones, 28 por ciento.
Desde su punto de vista es mandatorio para las autoridades nacionales emprender una política para alcanzar la disminución en los costos de medicamentos, y es que hoy son los sectores con menores recursos económicos los que se ven más perjudicados en su salud debido a los altos costos de muchos fármacos.
"Estamos en el peor de los escenarios: Somos un país con poco ahorro, mucho desabasto, corrupción e incompetente. Es urgente una política de desarrollo de medicinas para todos".
Uribe Esquivel refirió que 73 por ciento del gasto de medicamentos en el país proviene del bolsillo de los mexicanos; además, 50 por ciento del dinero que las familias en el país destinan a salud es para la compra de fármacos, y ese porcentaje es aún más alto entre los hogares más pobres.
Dio en ejemplo del caso de India, donde se ha apostado al desarrollo de productos genéricos de calidad a través de una alianza entre los sectores académico, empresarial y gubernamental.
Este país asiático "tiene 20 años desarrollando su industria de producción de genéricos de productos farmacéuticos, y vende a todo mundo, incluso a China".
India, resaltó, vende ocho por ciento del volumen de fármacos de todo el mundo al 1 por ciento del costo de los productos originales, es decir, ocho veces más barato de lo que cuestan los fármacos en el resto del orbe.
Esta industria ha generado que esa nación exporte 4 billones de dólares en este tipo de productos, emplea 5 millones de trabajadores directos y 24 millones indirectos, los empresarios han invertido 1.2 billones de dólares y todas las universidades de India permiten que 10 mil estudiantes desarrollan tesis de licenciatura, maestría y doctorado sobre productos de investigación en ciencias farmacéuticas.
"Es una sociedad donde está alineada la universidad, empresario y productor de productos farmacéuticos. Se trata del país más independiente farmacológicamente del planeta, incluso por encima de Estados Unidos".
Samuel Ponce de León, jefe de investigación de la Facultad de Medicina de la UNAM, advirtió que a escala global el movimiento antivacunas está creciendo debido a que muchos padres consideran que éstas pueden tener efectos en sus hijos.
Esto representa un riesgo debido a que no usar ese tipo de productos podría conllevar a un riesgo para la salud de la humanidad ante el desarrollo de alguna epidemia, un virus o bacterias resistentes.
Por ello, llamó a las autoridades mexicanas a que se considere como una obligación de Estado elaborar un sistema de vacunación obligatorio.
