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Se incrementa tensión en calles de Venezuela

Miles de personas marchan todos los días contra el gobierno de Nicolás Maduro


  

 

Después de años de un declive económico, Venezuela está a la puerta de la peor crisis de su historia, pues prácticamente todos los días se respira gas lacrimógeno en las calles de Caracas, los gobiernos vecinos emiten condenas cada vez más severas y el presidente Nicolás Maduro recién hizo un llamado para reescribir la Constitución.


Pero, ¿cómo es que llegó hasta este punto un país que en algún momento fue visto como un modelo para los movimientos de izquierda?, ¿qué es lo que sigue?


Los venezolanos han salido a las calles casi a diario durante un mes para protestar en contra del gobierno de Maduro y exigir elecciones inmediatas.


La reciente ola de manifestaciones surgió a raíz de un fallo de la Corte Suprema para "eviscerar" al Congreso, donde la oposición es mayoría. Sin embargo, no tardó en revertirse esa decisión, pero la gente siguió saliendo a las calles para expresar su indignación con el Gobierno.


Cabe señalar que el descontento social ha dejado al menos 35 personas muertas durante el último mes.


Durante muchos años, las cúpulas controlaron la política venezolana y los pobres tenían muy poca voz; sin embargo, el difunto presidente Hugo Chávez ganó la elección de 1998 con la promesa de alterar el viejo orden y canalizar las enormes riquezas petroleras del país hacia la gente de menores recursos.


Pero, las tasas de pobreza cayeron de manera considerable durante su gobierno, aunque muchas personas continúan viéndolo como una especie de Robin Hood que les proporcionó vivienda, una mejor educación y una voz en el gobierno.


Poco después del fallecimiento de Chávez, el precio del crudo perdió la mitad de su valor, lo que colocó a Maduro, su sucesor elegido personalmente, en una situación complicada. Los pronósticos indican que la economía de Venezuela se contraerá un 8 por ciento este año, y el Fondo Monetario Internacional prevé que la inflación alcance los cuatro dígitos el año entrante.


Los detractores aseguran que el plan de Maduro para convocar a una convención constituyente es una treta para posponer las elecciones, en las que las encuestas pronostican una derrota para el oficialismo.


Se supone que el Gobierno sostendría comicios regionales este año y presidenciales en 2018. Sin embargo, el proceso de reescribir la Constitución podría demorar el proceso electoral por más de un año.


Históricamente, el Ejército venezolano ha sido el árbitro en las disputas políticas y algunos miembros de la oposición han hecho un llamado para su intervención.


Pero, tanto Chávez como Maduro, han sido astutos para ganarse a los altos mandos por medio de favoritismos y ofreciéndoles puestos en el Gobierno, por lo que no existen muestras visibles de descontento ni siquiera en los niveles más bajos.


De hecho, las fuerzas de seguridad han sido las principales represoras de las protestas que se registran prácticamente a diario en las calles.



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