410 Gone


openresty
ConParticipación - ConParticipación 410 Gone

410 Gone


openresty
Noticias
410 Gone

410 Gone


openresty
ConParticipación

ConParticipación

Email: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este domingo que comenzará a renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con los dirigentes de Canadá y México, con los que se reunirá dentro de poco.


  

 

El TLCAN, en vigor desde enero de 1994, agrupa en una amplia zona de libre comercio a Estados Unidos, México y Canadá, y fue uno de los blancos predilectos de Donald Trump durante la campaña electoral, al considerarlo causante de un éxodo de empleos estadounidenses hacia México.


La nueva administración republicana ya advirtió que si sus socios se oponían a una negociación “que aporte a los trabajadores estadounidenses un acuerdo equitativo”, Estados Unidos abandonaría el TLCAN.


Según los estatutos del Tratado, una de las partes puede notificar a las otras su intención de retirarse, momento en que se abre un periodo de 180 días para comenzar nuevas negociaciones. Si no se alcanza un nuevo acuerdo, el antiguo se disuelve.


El flamante presidente estadounidense alabó a su par mexicano -“ha sido realmente extraordinario”, dijo- y expresó su deseo de alcanzar “muy buenos resultados” con el país vecino en materia de inmigración y de seguridad.


Durante su campaña, el magnate inmobiliario prometió construir un muro en la frontera entre Estados Unidos y México, e insistió en que sería México quien la financiaría.

El mandatario estadounidense prohíbe financiar con dinero oficial a organizaciones extranjeras que realizan abortos y difunden información al respecto.


  

 

Este lunes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que su país aplicará una medida que prohíbe financiar con dinero oficial a cualquier entidad extranjera que realice abortos y difunda información sobre esa práctica como un método anticonceptivo aceptable, informa la prensa local.


De esta forma, Trump revoca otra de las medidas aplicadas por su predecesor, Barack Obama, quien en 2009 derogó esa normativa. El pasado 20 de octubre, durante el debate final entre Trump y Hillary Clinton, el candidato republicano se mostró muy crítico en cuanto a la política sobre el aborto de Obama, que también defendía la candidata demócrata.


"Respeto la vida" y, "si se hace lo que dice Hillary, uno puede sacar el bebé justo antes de dar a luz", una circunstancia que el hoy presidente de EE.UU. definió como "inaceptable".


Asimismo, el presidente estadounidense ha firmado otras medidas que prometió aplicar durante su campaña electoral, entre las que destaca retirar a EE.UU. del acuerdo del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por sus siglas en inglés).

El Pontífice dice sobre Trump: “No me gusta anticiparme a los acontecimientos. Veremos qué hace”


  

 

El viernes, a la misma hora que Donald Trump juraba su cargo en Washington, el papa Francisco concedía en el Vaticano una larga entrevista a EL PAÍS en la que pedía prudencia ante las alarmas desatadas por el nuevo presidente de Estados Unidos —“hay que ver qué hace, no podemos ser profetas de calamidades”—, aunque advertía de que, “en momentos de crisis, no funciona el discernimiento” y los pueblos buscan “salvadores” que les devuelvan la identidad “con muros y alambres”.


Durante una hora y 15 minutos, en una sencilla habitación de la Casa de Santa Marta donde vive, Jorge Mario Bergoglio, que nació en Buenos Aires hace 80 años y se encamina a su cuarto año de pontificado, aseguró que “en la Iglesia hay santos y pecadores, decentes y corruptos”, pero que lo que más le preocupa es “una Iglesia anestesiada por la mundanidad", lejana a los problemas de la gente.


Sacando a veces a pasear el humor porteño, Francisco demuestra estar al tanto no solo de lo que ocurre dentro del Vaticano, sino en la frontera sur de España o en los barrios bravos de Roma. Dice que le encantaría ir a China —“en cuanto me inviten”— y que, aunque de vez en cuando pega “patinazos”, su única revolución es la del Evangelio.

Actualmente es cada vez más frecuente que los miembros de la familia compartan la cena o los momentos juntos con el móvil o la tablet en la mano y no entablen una conversación.


  

 

Una experta de la Universidad de Harvard en Estados Unidos explica los beneficios de compartir este espacio sin dispositivos móviles.


Un artículo publicado en el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME) refiere una iniciativa que nació hace seis años en la Universidad de Harvard llamado “Proyecto Cenas en Familia” que busca convertir la cena en un espacio de encuentro cotidiano en el que también se promueva una sana alimentación.


La cofundadora del proyecto y terapeuta familiar, Anne Fishel, afirmó que si las familias se reunieran más seguido para compartir los alimentos en el desayuno, almuerzo y cena, su trabajo como terapeuta ya no sería tan necesario porque “está demostrado que los miembros de las familias que lo hacen padecen menos estrés y se sienten mucho más unidos”.


Fishel indicó que una de las ventajas de comer en familia es que “al llegar a la adolescencia, los hijos son menos propensos a padecer desórdenes alimenticios o depresión, así como a abusar de ciertas sustancias o a ejercer de forma precoz su sexualidad”.


“La conversación que tiene lugar alrededor de la mesa incrementa de un modo significativo el vocabulario de los niños, incluso más que leerles cuentos antes de dormir, y, además, mejora su rendimiento escolar”.


También dijo que al comer en familia, los niños “aprenden a comer más verduras y vegetales, por lo que disminuye la probabilidad de que sufran obesidad.

 

Además, se ha demostrado que cuando estos niños comienzan a hacerse cargo de su alimentación, mantienen estos hábitos saludables”.

Todos los derechos reservados Mirada y Participación Ciudadana A.C.

Síguenos por: 

410 Gone

410 Gone


openresty