Hola,
Tengo que pedir perdón por algo. Mucho de mi tiempo lo dedico a promover valores en la sociedad. Y, para serte honesto, a veces pienso que esto solo le importa a muy poca gente y que los valores se están perdiendo sobre todo en los niños y jóvenes.
Pues bien, hace unos días una persona necesitada tocó a la puerta de mi casa pidiendo ayuda para pagar un gasto urgente. Pedía limosna. Pues bien, antes de que me diera cuenta, mi hijo mayor, de 9 años, se acercó y me dijo que le iba a regalar a ese señor el dinero que el ratón de los dientes le había dado. Fue a su cuarto y se lo dio a esa persona.
Me dejó con sentimientos encontrados. Por un lado, me sentí muy orgulloso de mi hijo. Y al mismo tiempo me sentí mal por desconfiar de los niños y de los jóvenes. Perdón: tengo que compartir con mis hijos y con los demás los retos que me emocionan, los de un México con valores.
Los terremotos, o una persona que toca pidiendo ayuda, pueden abrirme los ojos a esta verdad: los niños y los jóvenes son generosos y quieren ayudar.
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Confío que mi hijo será un gran mexicano. Lo quiero con todo mi corazón -claro, soy su papá-. Ya no pensaré desde la perspectiva de los adultos y escucharé más a los jóvenes. Es hora de que TODOS, jóvenes y adultos, nos preguntemos qué vamos a hacer por México.
Compárteme: ¿qué debemos hacer para mantenernos solidarios no solo cuando haya un temblor y para que tengamos una mayor participación ciudadana?
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Ojalá que todos los acontecimientos de las últimas semanas nos muevan. Es muy cómodo dejar que las cosas sigan como están. Pero creo que ya no hay marcha atrás: podemos hacer más por México y es lo que demostramos como ciudadanos en el mes de septiembre.
Perdón por no haber confiado más. Me corregiré. Vamos a atrevernos todos.
Hoy más que nunca, creo en México. Creo en ti, joven, que demostraste en los terremotos de septiembre que no eres pasivo y que tienes un gran amor a tu patria. Creo en ti, ciudadano ya no tan joven, que has sido capaz de ayudar sin esperar nada a cambio.
La montaña rusa seguirá. México continuará transformándose. Es hora de decidir si te subes a la montaña rusa de la transformación o te quedas sentado observando a que pase.
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Tomemos conciencia.
El bien de todos es tarea de todos.
Marcial Padilla
Director de ConParticipación
