Cada vez más países se unen a esta nueva ideología para tener una política "de inclusión" sin tomar en cuenta el daño que esto generará en las familias y la sociedad entera.
Con la resolución, las parejas homosexuales adquieren los mismos derechos de las uniones heterosexuales. De esta forma, los gays podrían reclamar pensión, visita a su compañero sentimental en hospitales y cárceles así como dar el consentimiento asistido en caso de una fatalidad.
El reconocimiento de la unión de hecho homosexual implica también la protección patrimonial de los bienes que se adquieran durante la convivencia de la pareja.
Diputados del bloque cristiano y representantes de la Iglesia católica consideran que es necesario revisar la sentencia debido a que, según ellos, contraviene con lo que estipula el Código de Familia.