El mundo entero necesita legisladores que defiendan los derechos fundamentales del ser humano.

El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Ben Carson, continúa con su defensa de la vida en su campaña electoral.

Después de comparar en una entrevista en la cadena NBC el aborto con la esclavitud, Carson señaló de llegar a la Casa Blanca, se convertiría en un presidente defensor de la vida.

En declaraciones a Breitbart, el candidato republicano reiteró su objetivo de restaurar en Estados Unidos una "cultura de la vida" y promete que, si es elegido presidente, utilizará su cargo para "apoyar los derechos constitucionales de los no nacidos".

"En primer lugar, me gustaría usar el púlpito para hablar de la cultura de la vida" justificó al tiempo que dijo nombrará jueces y magistrados con un perfil provida que favorezcan las resoluciones que protejan los derechos de los no nacidos.

Carson es uno de los candidatos republicanos que más firme se ha mostrado en la defensa de la vida y ha considerado al aborto como "el enemigo de nuestros niños" y ha defendido que la estabilidad financiera y las mejoras de educación no sirven de nada "si nuestros hijos no están vivos para experimentarlo".

De acuerdo a una reciente encuesta de NBC News y del diario Wall Street Journal, de celebrarse ahora las elecciones presidenciales, Benjamin Solomon Carson obtendría un 47% del voto de los estadounidenses, en un empate con Hillary Clinton que lidera las encuestas demócratas.